31 de marzo de 2010

Ecosociedad Continua

Artículo para Sxxi.net - 56
Darío Salazar

Ecosociedad es un proyecto continuo que existe por la necesidad de cambiar los esquemas culturales y educativos de la sociedad colombiana. Los seres humanos, pasajeros en este planeta, con el obsequio de la vida en la dimensión biológica y espiritual, estamos invitados a pensar y actuar de manera concordante con la naturaleza. En el universo nada es mezquino, al contrario todo es generoso y abundante, existe para los que han vivido, los que vivimos y ojalá para quienes nos precederán.

Ecosociedad es una invitación para las personas, empresas, organizaciones, gobiernos y Estados, a disfrutar nuestros recursos y hacer el uso necesario de ellos sin alterar sus condiciones. Es una invitación para recuperar los ecosistemas degradados y estabilizarlos para que hagan parte de la dinámica de la Tierra. Ello implica una reconsideración de los esquemas sociales, productivos y económicos y un cambio de hábitos de vida. Ese ideal es por el que trabajamos con la seguridad de no estar equivocados. Algunos pensarán en que esta utopía no se concretará pero tenemos la responsabilidad de mostrar el camino que consideramos, por que en el que estamos la perdición es evidente.

Ecosociedad es educación, cultura, decisiones, estilos de vida sanos, protección y prevención, es una política pública de Estado que debe tener aplicación desde la gobernabilidad. Nos merecemos lo que tenemos, pero no tenemos lo que nos merecemos. Gracias a todas y todos por el apoyo hasta ahora recibido y por continuar creando redes de trabajo para cambiar lo que somos.

Terremoto en Chile



La Organización de Naciones Unidas colaborará con el gobierno chileno en la identificación de las necesidades más urgentes derivadas del terremoto y maremoto que padeció la nación sudamericana el pasado 27 de febrero, según lo dio a conocer el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon.




La presidenta saliente de Chile, Michelle Bachelet, calificó de enorme la magnitud de los daños causados por el terremoto y dijo que el país necesitará al menos tres años para reconstruir las zonas afectadas. El movimiento telúrico, de 8,8 grados en la escala de Richter, deja hasta el momento un saldo preliminar de más de 800 muertos, una cifra no precisada de desaparecidos, 500 mil viviendas destruidas y dos millones de damnificados.

Se trató del segundo terremoto en intensidad de la historia chilena, después del ocurrido en 1960 en la sureña provincia de Valdivia, de 9,5 grados en la escala Richter y considerado el mayor registrado en el mundo.
El Secretario general de Naciones Unidas dijo que hasta ahora las carencias principales radican en vivienda, sanidad, hospitales de campaña, generadores eléctricos y comunicaciones. Para esa labor, la ONU y el gabinete del presidente electo de Chile, Sabastián Piñera, acordaron crear un grupo de trabajo para precisar los detalles y cantidades de la asistencia.
Los datos oficiales más recientes fijaron en 30 mil millones de dólares los daños materiales. Asimismo, cerca del 50 por ciento de los chilenos vivía en las zonas devastadas, declaradas en Estado de Excepción y Catástrofe por la presidenta Michelle Bachelet.
Durante su estancia en Chile, el máximo responsable de la ONU anunció la entrega de 10 millones de dólares del fondo de emergencia de la organización para apoyar los esfuerzos de recuperación de los chilenos.
“Hay diversas áreas en que el gobierno chileno quiere contar con apoyo específico de la comunidad internacional”, explicó Ban luego de una visita de dos días al país suramericano y a las áreas más dañadas por el seísmo que afectó desde el puerto de Valparaíso hasta Concepción, la segunda ciudad del país, ubicada 500 kilómetros al sur de la capital.

Concepción cambió de lugar
Según un estudio preliminar llevado a cabo por científicos de varias universidades en Estados Unidos y Chile, el sismo movió a Concepción -la ciudad más cercana al epicentro- tres metros hacia el occidente. El terremoto tuvo dimensiones tan grandes -dicen los científicos- que logró cambiar de sitio a ciudades tan alejadas como Fortaleza, en el norte de Brasil.
La investigación fue llevada a cabo por científicos de las universidades del estado de Ohio, Memphis y Hawaii, y el Instituto de Tecnología de California en Estados Unidos, y la Universidad de Concepción y el Centro de Estudios Científicos en Chile.
Los investigadores analizaron las mediciones de las estaciones de GPS ubicadas en la región y descubrieron que, además de Concepción, Santiago se movió unos 27 centímetros hacia el suroeste, Buenos Aires unos 2,5 centímetros hacia el oeste y también hubo “movimiento significativo” de otras ciudades como Valparaíso en Chile y Mendoza en Argentina.
Los datos del movimiento de las ciudades fueron obtenidos comparando la ubicación precisa de las estaciones antes del terremoto con su ubicación después del sismo. Los científicos contaban con estaciones de GPS en la región porque éstas forman parte de un proyecto que están llevando a cabo desde 1993 para medir el movimiento de la corteza terrestre y la deformación de los Andes centrales y australes.
“Al volver a ocupar las estaciones de GPS existentes pudimos determinar el desplazamiento que ocurrió durante el terremoto”, explicó Mike Bevis, profesor de Ciencias de la Tierra de la Universidad del Estado de Ohio, quien dirige el proyecto de los Andes.
“Con la construcción de nuevas estaciones, el proyecto puede monitorear las deformaciones postsísmicas que se espera que ocurran durante muchos años, lo cual nos ofrece nueva información sobre la física del proceso de un terremoto”, afirmó el investigador.

El quinto más poderoso
Los científicos consideran que el terremoto de Chile es el quinto más poderoso que ha sacudido a la Tierra desde que están disponibles los instrumentos científicos para medir los cambios sísmicos.
El epicentro del terremoto ocurrió en una región de América del Sur conocida como el “cinturón de fuego del Pacífico” una zona donde se ubican varias placas tectónicas que están en permanente fricción y acumulando tensión.
El terremoto ocurrió cuando la placa de Nazca se deslizó por debajo de la adyacente placa de Sudamérica, liberando la tensión geológica que se había acumulado en las zonas convergentes. Según los científicos, el evento -aunque trágico- ofrece una oportunidad única para entender mejor los procesos sísmicos que controlan a los terremotos.
“El terremoto de Maule será uno de los más importantes grandes terremotos que se han estudiado"”, afirmó el profesor Ben Brookes, investigador de la Escuela de Ciencias del Océano y de la Tierra de la Universidad de Hawaii, quien también participa en el proyecto de los Andes. 

“Hoy contamos con instrumentos precisos y modernos para evaluar este tipo de eventos y como el terremoto desplazó a un continente ahora seremos capaces de obtener muestras espaciales densas de los cambios que causó”, concluyó el científico.


El agua que mata

Darío Salazar ( Artículo de Opninión - Sxxi.net 56)

Sabido es por estudios de Naciones Unidas que el consumo de agua contaminada o sin tratar deja más muertos que la misma guerra, tal como ha sido expresado este año a propósito de la celebración del Día del Agua en todo el mundo, fecha que se celebra el 22 de marzo desde 1993. El reporte del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) indica que 3,7% de todas las muertes se deben a enfermedades ocasionadas por el agua contaminada. Más de la mitad de las camas de los hospitales en el mundo están ocupadas por personas que padecen de enfermedades relacionadas con el agua.“Si no podemos lidiar con nuestros desechos, eso significa que más personas morirán por enfermedades producto del agua”, dijo Achim Steiner, subsecretario general de la ONU y director ejecutivo del PNUMA.

A propósito de consumo se señala que se necesitan tres litros de agua para obtener un litro de agua embotellada. Asimismo, indica que la cantidad de agua en botellas producida en Estados Unidos requiere el consumo de 17 millones de barriles de petróleo cada año, cifra que es proporcional en Colombia donde se recurre al agua envasada, (más cara que la gasolina), por el temor de no consumir agua contaminada. Bogot á y Manizales son de las pocas ciudades en Colombia donde se puede tomar agua directamente de la llave sin riesgo de enfermarse. Sin embargo, sus desechos si son arrojados a ríos como el Bogotá, poniendo en riesgo la vida de quienes deben tomar sus aguas más abajo, o como es el caso del río Magdalena, cuyas aguas son consumidas por muchas personas sin los tratamientos requeridos.

El consumo de agua está ligado a la capacidad y operatividad del Gobierno local, regional y nacional, teniendo como resultado que la mayoría de los municipios no disponen de tratamiento de agua para consumo y que el manejo de sus desechos es casi nulo, situación que parece no importarle a las Corporaciones, y menos al Ministerio de Ambiente y de Salud, quienes parecen no entender de estos temas.

La contaminación del agua afecta recursos alimentarios asociados como la pesca, ejemplo de esto, es la disminución cada año de peces en el Magdalena; y la agricultura, por que debe usarse en la irrigación, como es el caso del uso de aguas contaminadas en la sabana del río Bogotá para el cultivo de hortalizas. Se estima que más de 2.500 millones de personas en el mundo viven sin un sistema adecuado de saneamiento. Cada día, 2 millones de toneladas de aguas residuales y otros efluentes son vertidos sin control alguno. El problema es más grave en los países en desarrollo, en los que más del 90% de los desechos sin procesar y el 70% de los desechos industriales sin tratar se vierten en aguas superficiales.

De acuerdo al estudio de “Los municipios Colombianos hacia los objetivos de Desarrollo del Milenio” del Departamento Nacional de Planeación, la enfermedad diarreica ocupa uno de los primeros lugares de morbilidad en los menores de 5 años y genera el 20% de la consulta en los servicios de salud y el 10% de las hospitalizaciones pediátricas. La mortalidad por esta causa es
generalmente en el primer año de vida. En escolares, jóvenes y adultos las infecciones y parasitosis intestinal causan mortalidad por obstrucción intestinal, de la vía biliar, abscesos hepáticos y cerebrales y hemorragias de las vías digestivas bajas. El anterior panorama exige un compromiso serio de las autoridades para encaminar el tratamiento del agua como prioridad y sobre todo a no verter los desechos líquidos y sólidos a las fuentes de agua por que con ello alimentamos nuestra propia destrucción.

9 de marzo de 2010

Sistema Integrado de Transporte: El monopolio para todos

Por Darío Salazar

Con el paro que se vivió en Bogotá se hicieron evidentes las consecuencias del neoliberalismo y el accionar del capital en el servicio público del transporte. Los pequeños transportadores necesitan seguir en el negocio. Estamos de acuerdo, quieren ganar y está bien en participarles, es más, la compra debe ser hecha por la ciudad, y constituirse en una empresa de todos; lo mismo el Sistema Integrado de Transporte. No como hicieron Mockus, Peñalosa y Lucho, que entregaron a pulpos anónimos que se lucran con Transmilenio. Lo mismo debe pasar con el Metro, debe ser de todos; de la ciudad, como la ETB, como la EAAB.

Vender nuestras empresas es un error que no podemos cometer. Propongo recomprar a Codensa, y volver a nuestra EEEB, pagar la plática que invirtieron y chao. Los servicios públicos deben ser de todos. Podemos tener accionistas que deben ser los mismos ciudadanos(as) y las utilidades deben servir para financiar a quienes necesitan salud, alimentación, cultura, recreación, vivienda. Esa es la verdadera seguridad social y democrática.

Concordante con esta reflexión, me permito traer el texto publicado en la Edición 48 de Sxxi, que a propósito del paro realizado en Bogotá por los transportadores, cobra validez y vale la pena volver a compartirlo.


Monopolio 100% para Bogotá. La gallina de los huevos de oro debe ser de todos

Transcurrir por las vías que hoy hacen parte del corredor de la III fase de Transmilenio es difícil, y los ciudadanos se resignan pensando que por allí van a tener en un futuro cercano, una forma de movilidad que aliviará sus tiempos de recorrido, así sea apretados o en condiciones asfixiantes, como sucede hoy con lo que ya conocemos.

La promesa del Metro se ve lejana, pero no perdemos la esperanza de que Bogotá lo tenga, porque ello hace parte de la infraestructura básica para movilizarse en cualquiera de los sentidos de la ciudad o salir de ella de manera más práctica. Pero ante tanta maravilla y orgullo, de lo cual los medios se han encargado de reforzar en el caso del Transmilenio, lo que nadie sabe, es de quién es en realidad esta empresa, y cuando se pregunta, siempre dicen que es una sociedad entre la ciudad y los operadores, y que sus resultados financieros se van en operación, o sea, la ciudad termina poniendo todo y ganando nada.

¿De quién son las calles, las avenidas, los semáforos, toda la infraestructura que tenemos como ciudad? No hay más dueño que los ciudadanos, y es nuestro capital social,

así que no se puede entender como nuestra clase política, permita que la ley del capital se trague nuestro patrimonio, nuestros recursos y fuera de ello, los ponga a su servicio, nos cobre y se quede con todo sin retribuir nada. Desde esta columna pido al Congreso de la República, al Concejo de Bogotá, a los ciudadanos(as), al alcalde Samuel Moreno, iniciar un movimiento por la bogotanización económica de Transmilenio, así como he pedido, desde antes que se construya, que el Metro no tenga otro dueño que Bogotá.

No es políticamente presentable ante los colombianos que el Polo Democrático Alternativo, como partido que gobierna a Bogotá, pase de agache frente a los temas de los servicios públicos y el transporte masivo, y es necesario que como partido de izquierda, pida, gestione y ejecute la democracia, en el amplio sentido de beneficiar con sus actos a las generaciones presentes y futuras. Permitir que Transmilenio siga siendo la gallina de los huevos de oro para unos pocos empresarios y socios, es permitir que muchos ciudadanos no tengan sustentabilidad en alimentación, educación, salud, recreación, cultura, seguridad social e infraestructura, en una ciudad que crece cada día en población desamparada, desplazada y empobrecida.

Es por ello mismo, que las políticas neoliberales que se han implementado en gobiernos anteriores, no pueden ser la misma carta de navegación de quienes representan los intereses de las mayorías, como debe ser el caso de quienes hoy gobiernan a Bogotá, ni podemos construir una ciudad para que solo los ricos se enriquezcan cada día más, mientras a los pobres les botan un refrigeriopara pasar el día. De acuerdo?

Cartilla Ecosociedad - poblaciones de Colombia






17 de febrero de 2010